los lugañeros con sandalias y camisetas cortas y nosotros con la maleta llena de abrigos y calcetines de los gordos . Realmente, la gente de por aquí no recordaba temperaturas tan altas en estas fechas.
Pero tras la sorpresa ya está aquí el frío. Por la mañana no hay nada mejor para espabilarse. Doblas una esquina y de repente
te viene un viento polar que te
duele hasta el alma.
Ya me he agenciado un buen gorro, una buena bufanda y ahora estoy buscando unos calzoncillos de pana. Tal y como dicen, si no está en Nueva York es que no existe.
-2ºC y bajando...
1 comentario:
Aaaaaayyyyyy que frrrrriiiioooooo!!
Avisa al Major Bloomberg y que vaya poniendo estufas en la calle para cuando yo llegue ;)
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